Pérez Llorca diseña un Consell de gestión para reactivar la economía con una bajada de impuestos inmediata
Pérez Llorca reordena el Consell para priorizar la bajada de impuestos y la vivienda como motores de la reconstrucción El president de la Generalitat diseña un ejecutivo de gestión con José Antonio Rovira en Hacienda para ejecutar la reforma fiscal y sitúa a Susana Camarero al frente de una gran vicepresidencia social enfocada en el empleo y la emancipación juvenil
El president de la Generalitat, Juanfran Pérez Llorca, ha dado a conocer este miércoles la composición de su nuevo gobierno, una estructura de once consellerias diseñada para afrontar la recuperación económica y social de la Comunidad Valenciana tras la etapa de emergencia. Con una clara orientación liberal y reformista, el jefe del Consell ha optado por reorganizar las competencias clave para priorizar la gestión eficiente de los recursos y el estímulo a la actividad privada, alejándose de estructuras administrativas sobredimensionadas.
La principal decisión política del president ha sido situar la política fiscal en el centro de su acción de gobierno. Para ello, ha designado a José Antonio Rovira, hasta ahora titular de Educación, como nuevo conseller de Economía, Hacienda y Administración Pública. Rovira, un perfil de total confianza de Pérez Llorca, asume el mandato de implementar la rebaja de impuestos comprometida en la investidura. El objetivo del Consell es aliviar la presión tributaria sobre familias, autónomos y empresas para incentivar el consumo y la inversión, considerados los únicos motores reales para superar las consecuencias económicas de la DANA.
En el ámbito de las políticas sociales, la reestructuración busca vincular la prosperidad económica con el bienestar individual. Susana Camarero refuerza su posición como Vicepresidenta Primera y asume una gran cartera que unifica Vivienda, Juventud, Empleo e Igualdad. Esta decisión responde a una visión estratégica: abordar el problema de la vivienda desde la oferta y la capacidad adquisitiva, ligándola directamente a la creación de empleo de calidad. El gobierno autonómico pretende así facilitar el acceso a la propiedad privada y el desarrollo de proyectos de vida autónomos para los jóvenes, reduciendo la dependencia de la administración.
La arquitectura institucional se completa con el nombramiento de José Díez Climent como Vicepresidente Segundo y conseller de Presidencia. Díez Climent tendrá bajo su responsabilidad la coordinación política del gabinete y la gestión de la Política Lingüística, con la premisa de garantizar el cumplimiento del marco constitucional y estatutario en la defensa de las señas de identidad valencianas. Asimismo, Miguel Barrachina, nuevo titular de Agricultura, ejercerá como Portavoz del Gobierno, aportando su experiencia parlamentaria para trasladar a la opinión pública las reformas emprendidas.
El ejecutivo mantiene la continuidad en áreas técnicas fundamentales, confirmando a Vicente Martínez Mus en Infraestructuras y a Marciano Gómez en Sanidad. Con este equipo, Pérez Llorca cierra la crisis de gobierno y pone en marcha una maquinaria administrativa centrada en la estabilidad institucional, el respeto a la ley y la libertad económica como garantías de futuro para la Comunidad Valenciana.
