Berta Peiró confiesa sus "manías" como Fallera Mayor: chocolate, caldo y estilo propio.
Berta Peiró repasa su reinado en 'Es Fallas, La veu del foc' y desvela las anécdotas de su paso por el cargo, desde los nervios de la Crida hasta los trucos que utilizó para resistir la agenda
La Fallera Mayor de Valencia 2025, Berta Peiró, ha visitado hoy los estudios de esRadio Valencia para hacer balance de su reinado en el programa ‘Es Fallas, La veu del foc’. En una entrevista cercana y alejada del protocolo oficial, Peiró ha desvelado los aspectos más personales de un año que define como «un máster de vida» y que ha cambiado su forma de ver la fiesta para siempre.
Preguntada por sus imprescindibles para afrontar la intensidad de la Semana Fallera, la Fallera Mayor ha confesado dos secretos innegociables: batidos de chocolate y caldo caliente. «Me puedo beber muchos al día, es lo que me da energía», ha bromeado sobre su adicción al chocolate, mientras que el caldo casero se ha convertido en su ritual matutino para «regenerarse» y entrar en calor antes de salir de casa, un truco heredado de su tía que le ayuda a mantener el ritmo desde las cinco de la mañana.
Un estilo propio y la ‘prueba de fuego’ de la Crida
Sobre su indumentaria, uno de los temas que más expectación genera, Peiró ha reivindicado un estilo «clásico pero juvenil». Ha destacado que, aunque respeta la tradición, le gusta innovar con detalles como el uso de lentejuelas en trajes de particular, algo que se atrevió a lucir en una final de Playback con un conjunto rojo. Además, ha confesado que elegir el color del espolín oficial, un tono Melanzane, fue una decisión instintiva y rápida, en la que contó con el apoyo unánime de su familia.
El momento más crítico del año fue, sin duda, la Crida. Peiró ha reconocido que los nervios casi la traicionan en las Torres de Serranos. «Cuando subí al coche lo primero que hice fue ponerme el vídeo de mi discurso para repasarlo, no quería fallar», ha recordado. Sin embargo, ha asegurado que una vez ante el micrófono, la emoción del momento hizo que todo fluyera, convirtiéndolo en el recuerdo más impactante de su reinado junto a la Ofrenda.
De cara a 2026, Berta Peiró tiene claro su propósito: volver a disfrutar de las Fallas «desde abajo», con su comisión y sus amigos, recuperando la normalidad pero con la satisfacción de haber representado a Valencia en lo más alto.
