La Diputación de Valencia inyecta más de 783.000 euros para salvar el patrimonio eclesiástico de 11 municipios
Utiel, Llíria y Oliva encabezan las inversiones de un plan que busca frenar el deterioro de iglesias y ermitas históricas mediante un convenio con el Arzobispado
La Diputación de Valencia ha dado luz verde a una nueva partida de 783.231 euros destinada a la recuperación de urgencia de edificios religiosos en 11 localidades de la provincia. Esta inyección económica, aprobada en Junta de Gobierno, se enmarca dentro del convenio de colaboración singular con el Arzobispado de Valencia y tiene como objetivo proteger inmuebles que, por su valor arquitectónico, trascienden su uso religioso para convertirse en bienes culturales clave de sus municipios.
Con estas nuevas ayudas, la institución provincial cierra el ejercicio con un balance de 1,2 millones de euros invertidos este año en 19 actuaciones en toda la provincia. El presidente de la Diputación, Vicent Mompó, ha defendido la medida señalando que «las iglesias y ermitas son mucho más que templos religiosos; constituyen una riqueza cultural y arquitectónica que debemos preservar desde el ámbito público».
Las actuaciones clave: de Utiel a l’Horta
El proyecto de mayor envergadura de esta convocatoria se llevará a cabo en Utiel, donde se destinarán 121.000 euros para la sustitución completa de la cubierta de la Parroquia de Nuestra Señora de Loreto, uno de los elementos patrimoniales más queridos de la comarca.
El listado de beneficiarios incluye intervenciones de calado (entre 50.000 y 113.000 euros) en municipios como Llíria, Benicolet, Canals, Catadau y Oliva, donde se acometerán restauraciones de cubiertas, fachadas, contrafuertes y elementos artísticos que presentaban riesgo de desprendimiento o deterioro avanzado.
El plan también pone el foco en las comarcas de l’Horta:
En l’Horta Nord, se financiará la rehabilitación de la Parroquia de Santa María Magdalena de Benifaraig, la Iglesia de San Honorato de Vinalesa y las fachadas de dos ermitas en Meliana.
En l’Horta Sud, las obras se concentrarán en la Iglesia de San Martín Obispo de Alcàsser y en la Ermita de la Virgen de Vallivana en Picassent.
Por su parte, la vicepresidenta primera, Natàlia Enguix, ha destacado que estas actuaciones son vitales para «frenar el deterioro a tiempo y evitar riesgos mayores», subrayando que la recuperación de estos bienes también actúa como un motor de desarrollo turístico y social para los pueblos.
