El Partido Popular ha solicitado este jueves un acto de conciliación ante el Juzgado de Primera Instancia de Valencia como paso previo a una querella criminal por un presunto delito de calumnias contra Vicent Mascarell, número dos de Diana Morant en el PSPV-PSOE y secretario de Organización del partido. La acción judicial responde a las acusaciones vertidas por Mascarell tras el ataque sufrido por la sede socialista en València el pasado domingo, donde apareció vandalizada con pintura negra y una sábana con el logotipo del partido tachado.

En declaraciones públicas y mediante un vídeo difundido en redes sociales, Mascarell responsabilizó directamente al Partido Popular de ser el “autor intelectual” del acto, afirmando que “tiene nombre y apellidos: Partido Popular”. Dichas declaraciones han sido consideradas “calumniosas” por el PP, que ahora exige una disculpa pública y por escrito, así como una justificación de las acusaciones vertidas.

El escrito judicial, al que han tenido acceso diversos medios, señala que el dirigente socialista acusó al PP de estar detrás de un ataque premeditado, con recursos económicos y una planificación que, según él, solo puede provenir de un partido político. El PP defiende que los hechos ya han sido reivindicados por un colectivo antisistema llamado Juventud Combativa, desligando cualquier implicación de la formación conservadora.

Mascarell, por su parte, ha reafirmado sus declaraciones, denunciando que la acción legal emprendida por el PP busca “acallar las voces críticas” y ha insistido en que “los discursos del odio del PP impulsan los ataques contra las sedes socialistas”. También ha señalado a figuras como José María Aznar, Alberto Núñez Feijóo y Mariano Rajoy como responsables de generar un clima de confrontación política.

Si Mascarell no se retracta, el PP presentará formalmente una querella criminal. El enfrentamiento político escala, en un momento de fuerte tensión entre ambas formaciones.